Para darnos una perspectiva más amplia sobre este tema que nos ocupa en los últimos artículos, la ansiedad. Antes de empezar con estrategias específicas, me gustaría que te tomarás un momento para reflexionar. Para que hagas lo que los psicólogos El Prat de Llobregat invitan a hacer a sus pacientes.
Te propongo una breve práctica.
Esta sería una práctica guiada con los ojos cerrados, pero te invito a que, mientras lees este artículo, leas un pequeño parágrafo, sigas la instrucción después con los ojos cerrados y de nuevo abrirlos para la siguiente instrucción y así sucesivamente. También puedes repetirla varias veces, con lo que al final quizá puedas hacer los pasos de memoria y no haga falta ir abriendo los ojos.
Después de leer este pequeño párrafo y el que sigue, cierra los ojos y respirar hondo unas cuantas veces.
Deja que la respiración sea natural. Deja que tu conciencia llene tu cuerpo para que puedas sentir dónde hay zonas de tensión; y tómate unos momentos para relajarte, de modo que habites un poco tu cuerpo. Después, vuelve a abrir los ojos y continua.
Ahora, desde esta mayor presencia, hasta cierto punto, podrías tomarte un momento para reflexionar sobre el último día o los dos últimos, sobre alguna situación que te haya provocado cierta sensación de ansiedad. No te ayudará elegir algo en lo que te hayas sentido traumatizado y que te haya provocado una experiencia importante, muy cargada, sino algo en lo que hayas sentido cierta sensación de ansiedad.
Si has estado muy tranquilo los dos últimos días, retrocede más en el tiempo, o adelántate a lo que puedas experimentar en el futuro que te provoque ansiedad. Y tanto si vas al pasado como al futuro, adéntrate en la situación lo suficiente como para congelar el encuadre en lo que sientas que más te va a agitar. Puede ser que veas a alguien y oigas algo que te molesta o te pone nervioso. Puede ser tu lista de tareas.
Respira, cierra los ojos de nuevo y hazlo, con calma y sabiendo que estás aprendiendo.
Igual que los psicólogos acompañan a sus pacientes en consulta, déjate acompañar por ti mismo, por ti misma, y evoca de nuevo la situación y congela ahora el encuadre cuando estés en medio de una experiencia que te produzca ansiedad. E imagina que puedes hacer algo como pulsar el botón de pausa en la situación. Después, vuelve a abrir los ojos y continua.
De nuevo evoca ese momento de pausa y vas a invocar cualquier versión del Buda que resuene para ti. Eso significa que invocas al Buda histórico o a alguien que conozcas y que encarne una atención, sabiduría y compasión increíbles, puede ser una figura espiritual, una persona viva o alguien que no esté vivo. Pero invoca a algún ser o entidad. Podría ser tu propio yo despierto en el futuro, tu yo más elevado, aquello en ti en lo que más confías. Pero invócalo ahora mismo. Y visualiza y siente e imagina esa mente y corazón iluminados, muy cerca; e invítalo a llenarte. Después, vuelve a abrir los ojos y continúa leyendo.
Cuando cierres de nuevo los ojos. Igual que hacen los practicantes de Movimiento Auténtico cuándo se entregan al misterio. Volverás a hacer lo mismo, invocar el momento, hacer la pausa, invocar a “Buda”. Recuerda, estás invitando a tu versión de Buda a que te llene, para que puedas sentir tus células, tu cuerpo y tu corazón llenos de esa energía iluminada, ese ser despierto, de corazón abierto, sabio y compasivo. Deja que te llene.
Para que puedas sentir con el corazón de Buda y mirar a través de los ojos de la sabiduría, y sentir que estás encarnando – tu cuerpo está lleno de esa energía iluminada. Nota cómo es eso. ¿Qué se siente al estar lleno de la energía de un ser despierto? Después, vuelve a abrir los ojos y continúa leyendo.
Al cerrar los ojos, de nuevo repite los pasos y observa: ¿Qué ocurre cuando miras la situación, cuándo te sientes de nuevo en la situación, descongelas el marco y dejas que este cuerpo de Buda, este corazón de Buda y esta mente de Buda naveguen un poco? ¿Cuál es la perspectiva? ¿Qué perspectiva tienes cuando miras a través de los ojos de Buda? ¿Cómo se relaciona tu corazón? ¿Y qué nuevas opciones o elecciones de comportamiento se abren ante ti? Y, de nuevo, cierra tus ojos y observa.
Estas son las palabras del místico sufí Rumí: «Vacíate de preocupaciones. Vacíate de preocupaciones. Piensa en quién creó el pensamiento. ¿Por qué te quedas en la cárcel cuando la puerta está tan abierta? ¿Por qué te quedas en la cárcel cuando la puerta está tan abierta? Sal de la maraña del miedo-pensamiento. Vive en silencio. Flota hacia abajo y hacia abajo en anillos de ser que siempre se ensanchan».
Deja que estas últimas palabras resuenen en ti y te invito a tomarte unos momentos más, con los ojos cerrados, para sentir la experiencia de una situación que provoca ansiedad desde la mente-corazón de un Buda.
Y cuando estés preparado… abre los ojos y observa el mundo. Tu mundo interno, y el mundo que te rodea.
Aleix Boronat Monfort
Director y fundador de l’Espiral. Terapeuta Gestalt, Mentor en Mindfulness y Miembro adherente de la AETG. Formación en Psicoterapia Integrativa (programa SAT). Formado en técnicas psico-corporales (Yoga, Shiatsu y Movimiento, Bioenergética y Movimiento Auténtico).
